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A veces necesitamos que se nos recuerde por que el dinero no lo es todo:

 

1. Familia

Mientras que el dinero puede ayudar a tu familia para tener las cosas que necesitan y quieren, el dinero no puede darte una familia, hacer crecer tu familia, mantener a tu familia saludable o incluso dar a tu familia una felicidad duradera.  La unión familiar y el amor dependen del tiempo de calidad invertido, no el dinero gastado.

2. Salud

Claro, el dinero puede pagar por las visitas al médico y prescripciones, pero incluso los más ricos del mundo saben que el dinero no puede comprar la salud. Y el dinero no puede reemplazar o quitar la mala salud o enfermedad. Elije alimentos nutritivos y sal todos los días a dar una caminata para hacer ejercicio. Esas dos cosas no cuestan mucho y te ponen en ventaja para “comprar” su salud.

3. Felicidad

El dinero puede proporcionarte cosas que te pueden hacer feliz por un rato, pero la felicidad real y duradera no puede ser comprada.  Es algo que viene de la satisfacción interior. El conocimiento y la confianza en lo que somos y un propósito en la vida es la verdadera felicidad.  El dinero no puede comprar eso.

4. Fe

Escuchamos a las personas hablar acerca de su fe de muchas maneras diferentes, y tenemos fe en cosas diferentes, pero a que nunca has escuchado que alguien diga que tiene fe en el dinero. Probablemente no. Mientras que el dinero nos puede dar una sensación de seguridad,  también nos puede fallar, y a menudo lo hace. Mientras que el dinero nos puede abandonar o dejar caer, la fe en algo superior a nosotros mismos,  no lo hará.

5. Paz

Es una verdad bien sabida que el dinero puede comprar una cama, pero no puede ayudarte a dormir. Mientras que el dinero puede proporcionarte cosas que necesitas y quieres, el dinero no puede alterar tu estado de ánimo lo suficiente como para que tengas una paz duradera. Eso es algo que viene de dentro y el dinero nunca te lo proporcionará.

6. Propósito

Independientemente de lo que algunos pueden pensar, el dinero (o adquirir dinero) no es el propósito de la vida. Se nos enseña desde el principio que el amor al dinero es la raíz de todo mal. Es importante leer con mucho cuidado, el amor al dinero es la raíz de todo mal, no el dinero. Debemos usar el dinero como una herramienta con la que construir una vida. Hacer del dinero tu propósito en la vida es muy peligroso. Encuentra un propósito que te satisfaga y de sentido a tu vida.

7. Crecimiento Personal

La vida es un proceso de crecimiento personal y aprendizaje, y mientras que el dinero puede proporcionar la oportunidad para ese crecimiento, nunca será capaz de proporcionar el propio crecimiento. El aprendizaje y crecimiento proviene de un cambio al interior de nosotros no del dinero en efectivo en nuestra cuenta bancaria, o la línea de crédito autorizada en nuestras tarjetas de crédito. Aprender constantemente cosas nuevas nos abre la vida a nuevas posibilidades y nuevos horizontes. El dinero no puede abrir nuestra mente.

8. Amor

El amor es verdaderamente el mejor regalo de la vida, el amor de un hijo, un padre, un esposo, un hermano o un amigo. El amor es el motor que mueve al mundo, y ese motor nunca debe ser el amor al dinero, sino el amor por las personas. Eso es lo que traerá la alegría verdadera y duradera. ¿No es eso lo que todos estamos buscando? El dinero no puede comprar el amor. Simplemente dicho y muy cierto, por cierto.

9. El dinero no puede comprar todo

Mientras que con el dinero puedes comprar cosas materiales, pagar doctores y alimentos para el cuidado de la salud, incluso “comprar” algunas personas, hay cosas que el dinero no puede comprar.

10. Alegrí­a

Mientras que algunos dicen que alegrí­a y felicidad son lo mismo, en realidad son dos cosas diferentes. La felicidad es el sentimiento de sobresaltos que se presenta cuando algo agradable  pasa en nuestras vidas. La felicidad puede ser tan simple como un cono de helado o un buen libro. Por el contrario, la Alegrí­a es una satisfacción profunda que nada ni nadie te puede quitar. Y el dinero ciertamente no puede traer alegrí­a a nuestras vidas. El dinero es superficial. La Alegrí­a esta en tu interior.

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